El
Yoga es una disciplina psicofísica nacida en India hace varios milenios, que
tiene como meta lograr la armonía interior y mejorar la calidad de vida.
Armonía interior que debe ser entendida como un estado de bienestar
psico-físico.
El
Yoga es la disciplina oriental que más se practica en occidente, ya que ha
demostrado sobradamente su especial utilidad para las personas que viven en
grandes ciudades con un ritmo de vida acelerado y con estrés cotidiano.
Cada
vez son más los médicos que recomiendan a sus pacientes la práctica de Yoga
como herramienta para mejorar su calidad de vida.
La práctica regular del Yoga aporta muchos beneficios que se empiezan a sentir desde el inicio mismo del curso, y mejoran con la práctica a lo largo del tiempo.
Entre
los beneficios más útiles que aporta el Yoga se encuentran:
a)
reducción del estrés y la ansiedad, las técnicas de Yoga actúan sobre el
sistema nervioso, relajándolo y dándole el descanso necesario. De esta manera
se previene el incremento constante de los niveles de ansiedad y estrés.
b)
toma de consciencia del propio cuerpo, de sus funciones y sus necesidades.
c)
aprender a relajarse mental y corporalmente, aprendizaje que luego sirve para
encarar los problemas y dificultades cotidianas de una forma serena y armoniosa.
d)
mejora la circulación de la sangre que aporta oxígeno y nutrientes a los
diferentes órganos y tejidos del cuerpo.
e)
mejora la flexibilidad y movilidad del cuerpo, eliminando progresivamente
contracturas musculares y dolores crónicos, y revitalizando las articulaciones
y tejidos del cuerpo.
f)
mejora la concentración mental, pues a diferencia de un ejercicio físico convencional,
en Yoga cada movimiento y cada respiración debe ser un acto de consciencia
focalizada en el propio cuerpo.
g)
aprender a respirar de forma correcta y natural.
h)
aprender a encarar las situaciones cotidianas de manera positiva y serena.
i)
aporta una nueva energía y sensación de bienestar que se prolonga varios días
luego de la práctica.
j)
armoniza el cuerpo en su conjunto, restableciendo el equilibrio en sus
funciones mas vitales.
Además, en el YOGA también hay técnicas que te ayudarán entre otras cosas, a adelgazar y mantenerte en forma y sano.
¿Qué técnicas utiliza el Yoga?
a) Respiratorias: aprender a respirar
de forma correcta y natural, no lo hacemos normalmente, influenciados por el
estres.
b) Corporales: posturas corporales que
trabajan sobre diferentes órganos del cuerpo, estiramientos musculares que
ayudan a mantener la flexibilidad y movilidad del cuerpo.
c) Relajación: para lograr los máximos
beneficios del Yoga se aprenden las técnicas de relajación que incluyen la
relajación consciente.
d) Pensamiento positivo: aprender a
escuchar y tomar consciencia de nuestro cuerpo y de nuestra respiración, y aprender
de la relajación desarrolla una
sensación de bienestar físico y mental que nos ayuda a encarar las situaciones
y problemas cotidianos de una forma mas serena y con una actitud positiva.
¿Quién puede
practicar Yoga?
Todas las personas pueden. Incluso las
que que tienen limitaciones de índole física, ya que trabajando con un maestro
le indicará cómo beneficiarse enormemente de su práctica, a pesar de las
limitaciones.
La experiencia ha demostrado que el
Yoga es muy beneficioso para las personas que viven bajo el estrés constante de
las grandes ciudades y del ritmo de vida acelerado.
¿Qué se necesita
para practicar Yoga?
El Yoga es una disciplina que no
requiere de artefactos sofisticados, ni de grandes espacios.
Sólo se necesita un espacio adecuado,
tranquilo y limpio para realizar su práctica, sobre una alfombra o colchoneta.
La actitud positiva es un factor muy importante que
ayuda a la práctica de Yoga, pues aprender a escuchar a nuestro cuerpo requiere
el desarrollo de la paciencia y tolerancia.
El Profesor de YOGA integral tiene la oportunidad de escoger entre los diferentes ejercicios
dinámicos de yoga pudiendo hacer sus clases muy creativas.
Los contenidos en un curso de YOGA suelen ser los
siguientes:
Integración: El trabajo de integración es separar la vida
cotidiana de nuestra práctica de yoga, involucrarnos con nosotros mismos,
olvidarnos de las preocupaciones y conectarnos con los cuerpos (Físico, Mental,
Emocional, etc).
Elongación: Son los estiramientos del cuerpo, de esta manera
activamos los centros energéticos, rejuvenecemos el cuerpo, al igual que con
los ásanas.
Equilibrio: Las ásanas o posturas de equilibrio ayudan a
ganar una mayor concentración y al mismo tiempo nivelamos o “equilibramos”
energéticamente nuestro cuerpo, y los hemisferios del cerebro.
Ásana: Se llama ásana a diversas “posturas” que
trabajan sobre el cuerpo y la mente. Los ásanas actúan desde ciertos centros
energéticos situados principalmente a lo largo de la columna. Las claves de su
práctica son la lentitud (a la hora de hacer y deshacer el ásana), la fase estática
(o de mantenimiento), la respiración lenta, y dirigida, y la atención mental en
estado alerta y receptivo a lo que está sucediendo.
Pranayama: La expresión sánscrito pranayama denomina los
ejercicios respiratorios del yoga que llevan a la concentración del prana
(energía contenida en la respiración dentro del organismo). Pranayama significa
“control de la respiración”, siendo prana la energía mística que está en la
respiración; y yama: “control”.
Relajación: Después de un trabajo de yoga, relajamos nuestro
cuerpo, soltando los músculos y ligamentos trabajados.
Meditación: Es la mejor técnica para tranquilizar la mente. Hay
un montón de formas de meditar, visualizaciones, trabajo mental, mantras, etc.
El objetivo es descubrir tu manera de meditar.
Ya hemos
dicho que el YOGA es una herramienta para mejorar la calidad de vida mediante
respiraciones, ejercicios físicos y concentración.
Su
herramienta compañera imprescindible es la MEDITACIÓN. La meditación es entre
TÚ Y TÚ.
(A final de
semana artículo sobre la Meditación)
